Todo ello se refleja en las siguientes ventajas:
• Reduce el consumo de agua caliente. Al aumentar las concentraciones de oxígeno en el agua de lavado y favorecer la acción de los detergentes, no son necesarias altas temperaturas para conseguir una limpieza óptima. De hecho, se puede lavar con agua fría consiguiendo mejores resultados que los obtenidos con agua caliente sin OZONO.
• Reduce el consumo de productos químicos. Porque, además de aumentar su potencial detergente al oxigenar el agua, el OZONO abre las fibras de los tejidos, favoreciendo la penetración en las telas de los detergentes.
Asimismo, el poder desinfectante y oxidante del OZONO hace innecesaria la utilización de agentes blanqueadores a base de cloro (lejías).
Tampoco son necesarios los productos utilizados para equilibrar el pH del agua, ya que el OZONO lo mantiene en valores próximos al neutro.
• Reduce el tiempo/número de lavados. Al ser los detergentes más eficaces en presencia de OZONO, se consigue la misma limpieza en un tiempo más corto. Se puede llegar a reducir el tiempo de lavado convencional en un 33% aproximadamente.
• Reduce el tiempo/número de aclarados. Debido al uso de menor cantidad de químicos en el proceso de lavado, hay un menor depósito de residuos en los tejidos, con lo que se pueden evitar uno o dos aclarados y se reduce el tiempo de centrifugación y secado.
• Reduce los tiempos de secado y centrifugado. Porque el OZONO abre las fibras de los tejidos, lo que favorece la extracción de agua en el ciclo de centrifugado; asimismo, al contener los tejidos menor cantidad de residuos químicos, liberan mejor el agua.
• Reduce el consumo de agua. Al reducir o incluso eliminar fases del proceso de lavado, la cantidad final de agua utilizada es muchísimo menor. De hecho, la disminución del consumo de agua es la característica más notable de la ozonización.
• Elimina el problema de vertidos y residuos. El OZONO hace que, al final del ciclo de lavado, el agua residual quede libre de cualquier tipo de contaminación microbiológica, con un pH cercano al neutro y con cantidades menores de productos químicos. Por otra parte, al generarse in situ, se hace innecesaria su manipulación, almacenamiento o transporte, lo que redunda en una disminución muy significativa de los riesgos Derivados de estas actividades (irritaciones y corrosiones, accidentes graves por vertidos de sustancias peligrosas…).
• Aumenta la vida útil de los tejidos. Al verse reducida la temperatura de lavado, la cantidad de producto químico empleado, los ciclos de lavado y aclarado y los tiempos de secado, todos ellos factores que dañan los tejidos. De hecho, cuando los lavados se realizan con OZONO, se observa una gran reducción en la acumulación de fibras en los filtros de las secadoras. El aumento en la vida útil de los tejidos con OZONO es de un 25-50%.
• Aumenta la capacidad de los lavados. Al producirse un ahorro de tiempo en todo el proceso de lavado.
• Mejora la calidad del servicio y con ello la satisfacción del cliente final. La ropa lavada con OZONO queda limpia, desinfectada, sin residuos de detergentes o agentes blanqueadores que pueden producir alergias y úlceras de contacto; además, al abrir el OZONOlas fibras de los tejidos, estos se vuelven más esponjosos y suaves, sin necesidad de utilizar suavizantes, ya que el OZONO impide asimismo la formación de electricidad estática.
• Mejora las condiciones de trabajo. Al poderse trabajar sin altas temperaturas y reducirse los tiempos de lavado y secado y el consumo de productos químicos, las condiciones del entorno de trabajo mejoran notablemente.